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P. S.
Domingo, 4 de marzo 2018
Muchas anécdotas se acumulan en la memoria del técnico galés. Una de ellas se refiere a la segunda Copa de la UEFA que conquistó como jugador en el Liverpool. Recuerda «que era contra el Brujas. Yo fui titular, pero no era precisamente mi mejor partido. Ellos jugaban muy adelantados y yo no rascaba bola. Íbamos perdiendo 0-2 y me quitaron en el descanso. Me enfadé, me duché, cogí el coche y me fui a casa. Iba escuchando la radio. De repente marcamos el 1-2 y poco después el 2-2, justo cuando estaba en una rotonda. Entonces di la vuelta entera a la rotonda y volví al campo.
Cuando estaba entrando al estadio marcamos el 3-2. Salí corriendo del coche hacia el vestuario y llegué con el tiempo justo para esperar sentado a que entrara el equipo. Bob Paisley, que era el entrenador, se me acercó y me dijo: 'Creía que estabas en el coche camino de tu casa'. Me quedé helado. Le dije que sí, que me había ido, pero que había decidido volver. La verdad es que la decisión que tomé en la rotonda fue el único acierto que tuve en toda la noche. En la vuelta empatamos 1-1 y conseguimos el título».
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