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Real Sociedad: Hasta trece tránsfugas han defendido las dos camisetas

Los tránsfugas del derbi
  • Más de una veintena de futbolistas de Real Sociedad y Athletic han cambiado sus colores para jugar con el vecino, pero no todos saben lo que es jugar los derbis en ambos lados

Los derbis entre Real y Athletic siempre generan sentimientos enfrentados. Gipuzkoa-Bizkaia, Donostia-Bilbao, la Parte Vieja-Pozas, La Concha-Guggenheim... Y por supuesto los jugadores de un bando y otro suelen centrar las discusiones más acaloradas en las horas previas al choque. Para la afición txuri urdin sus ídolos son intocables, y siempre se anteponen a los del vecino. Mientras que los seguidores rojiblancos piensan de forma contraria.

Pero la historia de esta larga rivalidad es caprichosa y ha dado tiempo para que se hayan afiliado en uno u otro bando más de un tránsfuga para pertenecer a unos colores que otrora defendía. No se tratan de los futbolistas que han cambiado la camiseta guipuzcoana con la vizcaína, o al revés, -más de una veintena- sino de los trece que tuvieron agallas de disputar el derbi vasco vestidos con las dos zamarras. Rompiendo el corazón a más de uno.

Hay que remontarse a la década de los cuarenta para encontrar al primer futbolista que lució las dos camisetas en el derbi. El honor lo tiene el sestaoarra Isidoro Urra que tras enrolarse en las filas del Athletic poco antes de estallar la Guerra Civil, se enfrentó en dos ocasiones a los realistas -ganó las dos- en la temporada 41/42 y cinco años después cambió las franjas rojas por las azules para jugar a las órdenes de Benito Díaz en aquella Real apodada como equipo ascensor. No tuvo tanta suerte el centrocampista como realista, ya que cayó dos veces contra sus excompañeros, por una sola victoria.

Tres años después se da el caso de Antonio Aldonza. El defensa de Leioa debutó en la campaña 47/48 con el Athletic y ya en ese mismo curso tuvo la oportunidad de ganar en Atocha por cero a tres, a los que serían sus compañeros con el paso del tiempo. En su primer año en Donostia en 1950 no pudo jugar contra su exequipo, pero tras un breve paso por el Logroñés en la 51/52 regresó a las filas guipuzcoanas y tuvo el honor de medirse contra los vizcaínos en la victoria por tres goles a uno de los blanquiazules.

Espera de treinta años

A la vez que Aldonza abandonaba San Sebastián para poner rumbo al Xerez, Rafael Iriondo ponía el pie por primera vez en el vestuario txuri urdin tras trece temporadas, las mismas veces que se enfrentó a la Real, en el club zurigorri. El delantero gernikarra vistió en los cursos 53/54 y 54/55 la camiseta txuri urdin, aunque solo tuvo la oportunidad de jugar el derbi el primer año con resultado favorable (1-3) en su regreso a San Mamés, donde fue el artífice de uno de los goles realistas y en el empate de la vuelta en Atocha (1-1). Iriondo sumó un total de siete tantos en los derbis, seis como rojiblanco y uno como blanquiazul.

Más de treinta años tuvieron que pasar para ver en acción en un Athletic-Real a otro jugador con pasado en la escuadra rival. Es la segunda mitad de los ochenta, corren nuevos tiempos en la sociedad y también el fútbol. La Real acaba de conquistar dos títulos ligueros -como el Athletic- y uno de los partícipes de la gloria txuri urdin, Peio Uralde, recibe a los guipuzcoanos en San Mamés como flamante fichaje rojiblanco un 17 de octubre de 1987, donde cae por uno a cuatro.

El vitoriano, que cuenta en su haber con ocho derbis vascos con la zamarra realista, se encontró con sus antiguos compañeros en cinco ocasiones de las cuales solo saboreó una vez la victoria. Como realista marcó dos tantos en derbis ligueros, a los que hay que sumar otros dos más en la edición copera del 86 para eliminar en primera ronda a los bilbaínos. Como león anotó un tanto.

El actual director deportivo de la Real, Lorenzo Juarros, y Luciano Iturrino fueron de la mano al Athletic en la campaña 89/90. Da la casualidad también que ambos debutaron en las filas donostiarras en la 84/85 con Alberto Ormaetxea en el banquillo, y tras cinco años en Donostia cambiaron La Concha por la ría del Nervión.

Tras dos temporadas en la capital vizcaína, abandonaron la disciplina bilbaína para recalar en el Burgos -Loren- y el Logroñés -Iturrino-. Acabarían volviendo a la Real en los años posteriores con suerte desigual.

En los 90 se produjeron hasta seis salidas de la Real Sociedad con destino Bilbao. Los guipuzcoanos David Billabona; Bittor Alkiza; Joseba Etxeberria; Mikel Lasa, previo paso por el Real Madrid, Andoni Imaz y el navarro Jon Andoni Goikoetxea se convirtieron al rojo y blanco durante el transcurso de la década, suscitando, algunos más que otros, cierta animadversión cada vez que visitaban Anoeta.

Alkiza, como Loren e Iturrino, acabaría regresando a la Real antes de retirarse del fútbol. Andoni Imaz, por su parte, es ahora el delegado del Athletic.

Elustondo, ¿el próximo?

El nuevo milenio no trajo demasiada calma a las idas y venidas por la AP-8 dirección Bizkaia. El caso Zubiaurre y las marchas de Iñigo De Cerio y Xabi Castillo cuando la Real competía en Segunda no sentaron bien por suelo guipuzcoano, sin embargo, ninguno de ellos sabe lo que es jugar el derbi con las dos camisetas. No como Igor Gabilondo.

El añorgatarra, tras seis temporadas en la Real, es el último jugador que ha actuado en el derbi vasco por excelencia con las dos zamarras. Tiene el honor además, de rojiblanco, de participar en la última victoria de los leones (1-2) en Anoeta en el curso 11/12. Este domingo, Gorka Elustondo puede ser el último tránsfuga de los derbis, ya que sabe lo que es disputarlo con la Real, y está a la espera de hacerlo de rojiblanco en su segundo año en Bilbao.

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