Diario Vasco
Gero Rulli, Toño Ramínez y Ander Bardají.
Gero Rulli, Toño Ramínez y Ander Bardají. / LOBO ALTUNA

REAL SOCIEDAD

La portería será la primera línea en quedar cubierta en la Real Sociedad

  • Rulli, una vez se acabe de redactar y firmar el contrato de su compra, será presentado la próxima semana

  • El fichaje de Toño se abordará en cuanto sea oficial la continuidad del argentino mientras que Bardají ya sabe que estará en el primer equipo

La portería era la línea que más incertidumbre generaba cuando finalizó la Liga hace un mes y puede ser la primera en quedar completada para la próxima temporada. El hecho de que los dos porteros que tuvo la Real en el pasado ejercicio estuvieran cedidos obligaba al club a moverse obligatoriamente este verano. En una dirección o en otra. En el caso de Rulli, para buscar su continuidad, y en el de Oier Olazabal, para abrirle la puerta de retorno al Granada.

En realidad, conseguir el fichaje en propiedad del argentino ha centrado buena parte de los esfuerzos de los dirigentes blanquiazules. Un equipo se hace de atrás hacia adelante y contar con un buen portero bajo los palos es clave para cualquier club que tenga aspiraciones de moverse en la primera mitad de la tabla. Sin embargo, la compleja situación contractual del guardameta ha hecho necesario tirar de imaginación, paciencia y un cierto punto de valentía en el dinero a pagar para lograr amarrarlo hasta 2022.

El pasado viernes se cerró el acuerdo con el Maldonado, el poseedor de sus derechos, por siete millones de euros por el 70% de su propiedad. El pacto contó con el visto bueno del Manchester City, que tenía una opción preferencial para hacerse con él de diez millones de euros. En el acuerdo se recoge una opción futura de recompra citizen por una cifra superior a esa para asegurar la presencia de Rulli en San Sebastián a medio plazo después del esfuerzo realizado por parte del club.

Esta semana, como afirmó el lunes Aperribay en la rueda de prensa con motivo de la incorporación de Roberto Olabe como director de fútbol, se está trabajando en la redacción de los contratos y una vez que estén listos se procederá a firmarlos. «El acuerdo con el Maldonado es un hecho. Hay que completar los papeles y cerrar los escritos, que no es algo fácil. Hay que esperar a que los papeles estén firmados, porque hay muchas partes que intervienen en la operación, pero si todo va bien Rulli estará aquí. Hay borradores encima de la mesa y estamos discutiendo sobre ellos. Los acuerdos están concluidos pero nos queda por escribir la letra pequeña de los contratos».

Si todo va bien, la previsión es que la próxima semana se anuncie oficialmente su fichaje y que incluso el jugador interrumpa sus vacaciones para acercarse hasta Gipuzkoa y estar en la presentación antes de concentrarse con la selección argentina para la disputa de los Juegos de Río. Hay que recordar que Rulli se perderá por este compromiso internacional la pretemporada con la Real. La final olímpica está fijada para el 20 de agosto, por lo que si la albiceleste llega lejos se perdería, como mínimo, la primera jornada de Liga prevista para ese fin de semana.

Las espaldas bien cubiertas

Paralelamente, el club ha mantenido abiertas otras vías por si hubiese sido necesario activar alguna de ellas en caso de que las gestiones por Rulli se hubiesen torcido. Dentro de estas había también porteros de contrastada calidad, no solo de la Liga, y con buen palmarés. Eso sí, de un perfil diferente al tratarse de jugadores más mayores y de menor proyección. Pero de buen rendimiento presente como el argentino. Afortunadamente parece que no hará falta tirar de esta lista, porque la primera opción siempre ha sido la de atar al actual meta blanquiazul.

Una vez que se anuncie de forma oficial su continuidad, el club afrontará el fichaje de su compañero en la portería. Esto se debe a que el objetivo es encontrar a alguien que le complemente en el puesto y, en este sentido, el perfil de ese primer inquilino bajo los palos condiciona el resto de las decisiones.

La salida de Olazabal al concluir su préstamo por el Granada era evidente. El irunés no pudo aprovechar las escasas oportunidades que tuvo de jugar y los técnicos no veían conveniente su continuidad. A su vez, este entendía que con 27 años lo que más le convenía era buscar otro sitio en el que tuviese más posibilidades de pelear por la titularidad que aquí.

De esta manera, y siempre partiendo de la premisa de Rulli como primer guardameta, el club ha puesto sus ojos para escoltarle en Toño Ramírez, de 29 años, al que ha seguido de cerca en estos cuatro años desde que salió de la Real. Su paso por el Guadalajara, Leonesa y AEK Larnaca de Chipre le ha ayudado a formarse como jugador y está preparado para regresar. De esta forma se volvería a la fórmula que durante años encarnaron Claudio Bravo y Eñaut Zubikarai, con un meta titular definido de condición internacional y un suplente formado en la casa para cubrirle las espaldas.

Aperribay desveló el lunes que «Toño es uno de los porteros que queremos para que estén aquí, aunque también existen otras posibilidades sobre la mesa». En principio, su contratación se abordará cuando se haga oficial la de Rulli.

La novedad del tercer portero

El presidente sorprendió al anunciar esta semana que Ander Bardají también estará en la primera plantilla. «Queremos que lo haga, por lo que tendremos tres porteros. Si luego existiese la opción de una cesión que fuese interesante para su evolución se estudiaría pero la idea ahora es esta». La Real no contaba con tres metas desde la campaña 11/12, la primera de Montanier, cuando estuvieron Bravo, Zubikarai y Toño.

Lo cierto es que Eusebio necesita dos para realizar la pretemporada ante la ausencia de Rulli. Bardají tiene 21 años y en la campaña 12/13, en su segundo año juvenil, ya disputó siete partidos con el Sanse. Desde entonces ha sido el portero que ha jugado con mayor continuidad en el filial y los técnicos quieren verle compitiendo en el día a día en el primer equipo. En verano tendrá la posibilidad de participar en los amistosos, ya que no está Rulli y el técnico ha manifestado su intención de jugar más partidos de preparación que en años anteriores. De esta manera, y salvo giro radical, la portería de la Real estará defendida por Rulli, Toño y Bardají.