Empate a domicilio de un Sanse demasiado gris

El Teruel empezó sorprendiendo al Sanse. Los locales tuvieron la posesión y movieron de lado a lado a los atacantes realistas que saltaron a la presión, sin profundizar en sus ataques, pero siendo incómodos por el mero hecho de no permitir al Sanse la posesión. De esta manera, transcurrió el grueso de la primera parte. En el apartado de llegadas, los únicos 'uy' corrieron a cargo del conjunto visitante. Primero, fue Dadie, en la banda derecha, que con Gorrotxategi en el primero palo y Fiabema en el punto de penalti, optó por un disparo directo que se marchó alto. Minutos después, Marín, que volvió a estar gris, golpeó con la zurda y de rosca a punto estuvo de encontrar portería.

El paso por los vestuarios cambió muy pocas cosas. El Sanse continuó sin encontrar su juego ante la incapacidad de Marín y Magunazelaia de trazar líneas de pase claras para recibir balones de Gorrotxategi. Fiabema tampoco estuvo participativo para desahogar el juego, y Dadie y Balda no tuvieron su mejor día en el uno contra uno por la banda. Los pupilos de Sergio Francisco se sintieron ahogados, y el técnico irundarra rápidamente echó mano del banquillo, buscando la energía y el dinamismo de Eder por dentro aunque con poco efecto. El errenteriarra apenas entró en juego. Si en el primer tiempo hubo pocas oportunidades claras, en la segunda las ocasiones brillaron totalmente por su ausencia. De hecho, Ayesa se estiró para despejar un zurdazo poco peligroso del revulsivo Facu García en la única llegada algo clara de los locales.

El Teruel dio la sensación de ser superior, pero Ayesa apenas se vio obligado a intervenir. La oportunidad más clara del partido tuvo que esperar hasta el tiempo añadido. Ochieng, uno de los cuatro recambios introducidos por Sergio Francisco en Pinilla, percutió por la banda derecha y consiguió sacar un centro peligroso entre la defensa y el portero, Taliby despejó en semifallo y el rechace le cayó a Magunazelaia en el segundo palo, pero el eibartarra, sin presencia de portero bajo los palos, buscó la colocación y remató muy alto con el interior del pie. El Sanse sumó un punto a domicilio que puede considerarse positivo. El estreno liguero contra el Tarazona tampoco había sido convincente del todo en cuanto al juego, con lo cual el entrenador Sergio Francisco necesitará más tiempo para configurar su idea futbolística. El filial realista registró demasiado cambio de futbolistas en la pretemporada, y mientras no llega el mejor juego, se da por bien empleado el ejercicio de sumar puntos, además de mantenerse invicto con el balance de una victoria y un empate. La cuarta posición de la tabla contempla al filial realista, a dos puntos del líder Ponferradina y con el mismo balance de puntos que Deportivo, Nàstic y Unionistas.