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Juanmi, con Bellarabi en el amistoso jugado en Leverkusen.
Juanmi, con Bellarabi en el amistoso jugado en Leverkusen. / EFE

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La pretemporada se parecerá bastante a la del año pasado

  • Con el acceso a la fase de grupos de la Europa League Eusebio, que quiere volver en julio a Holanda, podrá trabajar tranquilo en verano

La victoria del Barcelona en la Copa del Rey ha traído consigo un verano tranquilo para la Real sin el riesgo de tener que disputar dos rondas previas para acceder a la fase de grupos de la Europa League. La consecuencia más inmediata es que Eusebio podrá trabajar con tranquilidad en pretemporada y cargar de forma adecuada el depósito de un equipo que la próxima campaña afrontará tres competiciones.

Hasta el sábado el diseño del periodo de preparación dependía del desenlace de la final de Copa. De haber tenido que jugar dos rondas previas, la primera a finales de julio y la segunda en agosto, el trabajo hubiera sido diferente. Por un lado, habría necesitado adelantar unos días el regreso a Zubieta para afinar el estado de forma para afrontar con garantías esas previas. Por otro, habría afectado a la celebración de los partidos amistosos de verano, porque no hubiese resultado nada sencillo encajar cuatro encuentros oficiales entre los ensayos de preparación. Ahora que ya sabe que hasta mediados de septiembre no tendrá que ocuparse a la Europa League, podrá diseñar una pretemporada con un guion similar a la del año pasado.

La vuelta al trabajo en Zubieta se producirá probablemente a mediados de la primera semana de julio. La temporada se prevé larga y cargada, con numerosos partidos oficiales y desplazamientos, por lo que cuanto más puedan cargar las pilas los jugadores y desconectar en sus vacaciones, será mucho mejor.

Hace un año el técnico planificó diez encuentros amistosos y ahora la cifra será similar. Queda por conocer el calendario de LaLiga, que se sortea en el marco de la Asamblea General de la Federación Española en julio. Ahí se sabrá cuándo arranca de forma oficial la Liga y se terminará de ajustar la programación de los ensayos veraniegos.

El año pasado la primera fase de la pretemporada discurrió en Gipuzkoa, con partidos ante el Tolosa, Logroñés en Laguardia y Villarreal en Zarautz. En la última semana de julio viajó a Holanda para medirse al Konyaspor, NEC Nimega y Heerenveen, y en agosto acudió a Inglaterra para enfrentarse al Burnley y al Middlesbrough de forma consecutiva. Después llegaría el amistoso ante el Eibar en Bergara y una última prueba en Leverkusen ante el Bayer.

Este año también parece que la Real regresará a Holanda a finales de julio para disputar varios partidos de preparación. La experiencia allí fue positiva por varios motivos. Se trata de un país con un clima suave para poder entrenar en buenas condiciones, tiene buenas instalaciones y está bien comunicado por carretera, lo que hace que los desplazamientos a los partidos sean cómodos y rápidos.

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