Diario Vasco

Carlos Vela, alguien debe mover ficha

Si algo no se le puede negar a Vela es su sinceridad a la hora de expresarse. Siempre dice lo que piensa y, aunque son contadas sus apariciones ante la prensa, es de agradecer que vaya con la verdad por delante. Así puede presumir de no engañar nunca a nadie.

Ayer fue rotundo al admitir que por su cabeza solo pasa cumplir el año de contrato que le resta y terminar. «Más claro no puedo ser», añadió. Sus declaraciones abren una etapa de obligados contactos entre el club y el jugador que debe concluir en verano con su situación clarificada, para bien o para mal. La Real no puede permitirse el lujo de que uno de sus hombres más importantes entre en su último año de contrato con el futuro sin resolver. En su día hizo una fuerte inversión por contratarle y firmarle una de las dos fichas más altas de la plantilla y ahora, antes de que quede libre dentro de un año, está a tiempo de recuperar parte de ese dinero.

Vela es un futbolista con una cotización importante en el mercado, especialmente al otro lado del Atlántico. Y si no tiene clara su continuidad aquí, a lo mejor la Real tiene que pasar por el mal de trago de venderle. No sería la primera vez que actúa así ni será la última.

La clave en estos tres próximos meses pasa por que el jugador aclare sus ideas y, una vez concluida la Liga el 21 de mayo en Balaídos, decida qué quiere hacer con su carrera. También sería interesante saber qué Vela nos queda por ver y cómo está su rodilla. Porque como él mismo confesó ayer su dinámica ha cambiado este año pero tampoco ha sido el mejor de su vida. Como muestra un botón: en la campaña 13/14 anotó 21 goles y dio 20 asistencias y en esta lleva ocho -tres de penalti- y seis. Compañeros como Illarramendi, Zurutuza, Iñigo, Yuri, Prieto o Willian José han ofrecido mejores prestaciones este curso y eso tampoco es normal. Alguien tendrá que mover ficha porque esta situación debe estar resuelta antes del 1 de julio.

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